Sacos de Carro para bebé

Sacos de carro para bebés frioleros

En las épocas más frías del año, a veces nos preocupa tener que salir de casa con nuestro bebé porque hace demasiado frío fuera, está lloviendo o hace mucho viento. Pero desde Tutete te traemos la solución: ¡sacos para el carrito!

Los sacos de carrito están pensados para proteger y abrigar a tu hijo del inclemente invierno. Están fabricados con tejidos cálidos y suaves que ayudan a mantener la temperatura corporal del bebé, restringiendo también un poco sus movimientos para evitar que se le enfríen las extremidades.

Están pensados para ser universales y poder usarse en cualquier tipo de carrito, de modo que todos llevan aberturas posteriores para poder introducir los cinturones y que el niño vaya seguro dentro del saco.

Algunos cuentan con forros interiores en la parte de los pies para proteger el tejido del roce y la suciedad de los zapatos, lo que prolonga enormemente su vida útil.

Las capuchas de estos sacos son muy importantes ya que protegen la cabeza del frío. Algunas llevan un pelaje por el borde que aporta más calidez y suavidad, pero se puede retirar si resulta agobiante o cuando toque lavarlo. Otras se pueden ajustar un poco más a la cabeza con cordones, lo que evita que el aire frío les enfríe las orejas.

Además, los sacos llevan cremalleras laterales que permiten introducir al bebé con comodidad y, si hace falta porque hace algo más de calor, abrirle un poco la parte superior del saco y darles un poco más de libertad.

Por otro lado, también te ofrecemos sacos de entretiempo, que cumplen una doble función. Al ser de tejido más fino y ligero, son perfectos para la época en la que hace menos frío, pero hace aire o llueve un poco ya que protege al pequeño lo suficiente como para que no se le enfríe el cuerpo. Pero también sirve como abrigo extra cuando hace un frío extremo y con el saco polar no es suficiente. 

Algo importante en lo que fijarse es el tamaño de los sacos. Hay distintos modelos pensados para rangos de edad más o menos amplios. Algunos de ellos incluso se pueden considerar evolutivos ya que puedes ajustar el tamaño según el niño crece.

Ya solo queda elegir el estilo que más te guste y ¡a disfrutar del frío!

Sacos de calidad contra el frío polar

A la hora de fabricar prendas térmicas, hay que seleccionar los mejores tejidos para ayudar a mantener y regular la temperatura a la vez que se protege del frío exterior. Además, ya sea por propiedad intrínseca del tejido o mediante el proceso de fabricación, se busca que los sacos sean hipoalergénicos para evitar la aparición de alergias en los más pequeños.

En muchos casos se eligen materiales como el poliéster de alta calidad por su resistencia, elasticidad e impermeabilidad. Además, es un tejido muy fácil de limpiar y normalmente permite incluso utilizar la lavadora.

Otros fabricantes optan por el algodón orgánico 100 % al ser un material sostenible y ecológico, de tacto muy agradable y fácil de lavar. También puedes encontrarlo mezclado con alguna fibra sintética para aportarle un poco de flexibilidad.

También podrás encontrar sacos para carritos fabricados con fibra de bambú, un material que está en auge debido a que es totalmente biodegradable y de cultivo muy sostenible. Normalmente se mezcla con algún otro tipo de tejido para que tenga más resistencia, pero hoy en día es una de las opciones más ecológicas del mercado.

Por último, mencionar que los rellenos de los sacos se fabrican con tejidos sintéticos como el plumón de fibras muy finas para asegurar la protección del bebé ante el frío. También son totalmente hipoalergénicos, por supuesto.