Disciplina Positiva:claves para una vuelta al cole exitosa
Por Angélica Joya – Psicóloga Clínica Adleriana y entrenadora en Disciplina Positiva
Educar sin desesperar – Ed. Planeta, 2023
Si eres padre o madre, seguramente a medida que finaliza agosto sientes el cansancio acumulado y las ganas de volver a la rutina. Sin embargo, aunque la idea de que tus hijos vuelvan al colegio puede parecer “maravillosa”, este regreso implica también muchos retos, especialmente si no inviertes un tiempo en planificar.
Bajo mi experiencia como psicóloga familiar y entrenadora de disciplina positiva hoy quiero compartir contigo 6 claves fundamentales sobre cómo la disciplina positiva puede ayudar en la vuelta al cole. Son claves que te ayudarán de manera práctica y muy realista, ya que también soy madre de familia numerosa y sé cómo puede costar aplicar la teoría que muchas veces nos sabemos de sobra.
6 estrategias de disciplina positiva que te ayudarán en la vuelta al cole
1. Prioriza espacios de conexión con tus hijos:
Durante el verano, solemos tener menos prisa y disfrutamos más de momentos en familia. Aprovecha esta experiencia para hacer una lista de actividades que disfruten juntos y piensa en cómo puedes seguir fomentando pequeños momentos de conexión durante la rutina escolar. Actividades sencillas como leer o dibujar juntos, jugar, pasear, cocinar, conversar en la sobremesa o compartir momentos de contacto físico cariñoso son muy valiosas.
No necesitas planificar grandes actividades ni dedicar demasiado tiempo.
Te aseguro que priorizar estos espacios de disfrute actúa como un potenciador de la cooperación en casa y en el colegio.
2. Elimina gradualmente hábitos insostenibles o poco saludables.
La flexibilidad del verano tiene una cara «B», con hábitos que adquirimos como excepciones pero que no queremos mantener durante el año escolar. Por ejemplo, el uso excesivo de pantallas, horarios de sueño irregulares o la falta de colaboración en las tareas del hogar. Identifica estos hábitos y cámbialos poco a poco.
Comienza con lo que facilite más tu vida, como la hora de dormir o la colaboración en casa, y luego aborda aspectos más conflictivos como el tiempo de pantalla.
3. Introduce los horarios antes del comienzo del cole.
La rutina proporciona seguridad a los niños, aunque no siempre la acepten con entusiasmo.
Empieza de manera gradual a introducir horarios fijos y sé constante con ellos. Dependiendo de la capacidad de adaptación de tus hijos, invierte al menos una semana (mucho mejor 2) en hacer un cambio gradual en su rutina.
Puedes comenzar con algo más amplio como adelantar la hora de la merienda y la cena para que el día sea más corto, y luego enfocarte en estructurar mejor la rutina de la noche o de la mañana.
4. Usa recordatorios externos.
Los recordatorios externos, como alarmas musicales, la tabla de rutinas o los carteles con las normas básicas de ciertas actividades evitan luchas de poder y ayudan a seguir una rutina de manera fluida, especialmente con menores de 8 años.
La clave está en implicar a los niños en su creación y evitar premios, amenazas o castigos.
5. Sé Consciente de lo que implica un cambio y promueve la expresión emocional.
Los cambios generan incomodidad y resistencia. Algunas personas se ajustan rápidamente, otras no tanto. La disciplina positiva invita a acoger todas las emociones de tus hijos y centrarte en corregir comportamientos irrespetuosos.
Promueve que compartan contigo pensamientos y emociones de rechazo, miedo, pereza y enfado, ya que esto facilita la adaptación al cole.
Para lograrlo, te dejo algunas ideas:
- Observa sus cambios en el comportamiento y el humor: No temas compartir con ellos si crees que algo puede estar afectándoles. Lo peor que puede pasar es que no aciertes, pero transmitirás el mensaje de “te veo”. Eso si hazlo siempre en un momento de calma y privacidad.
- Con los más pequeños realiza juegos de rol, practica rituales de despedida y lee cuentos sobre la vuelta al cole y el vínculo padres e hijos: Estos recursos les ayuda a procesar todos los cambios y previenen la ansiedad de separación que suele aparecer al principio de curso.
Para los mayores de 9 años, una actitud tranquila y curiosa cuando expresan sus emociones es suficiente: Frases como “gracias por compartirlo conmigo” y preguntas que empiecen por “¿Qué?” o “¿Cómo?” son útiles.
Algunos ejemplos de preguntas simples y poderosas son:
- ¿Qué cosas no te apetecen de…?
- ¿Cómo crees que puedes solucionarlo?
- ¿Hay algo que necesites de mí?
Evita las preguntas que empiecen por “¿Por qué?”, ya que en este tipo de situaciones suelen sentirse como un juicio y bloquean la comunicación.
6. Involucra a tus hijos en todo el proceso.
Si en el primer tip de hoy te hablaba de la importancia de la conexión, en este último te hablo del otro pilar fundamental que propone la disciplina positiva en la crianza: fomentar “la influencia”.
Todos necesitamos sentir que influimos en nuestra vida y los niños no son la excepción. Haz una lluvia de ideas sobre cómo pueden involucrarse en la vuelta al cole.
A continuación te doy algunos ejemplos que pueden ayudar:
- Explica los cambios y haz lluvia de ideas conjunta sobre cómo afrontarlos juntos.
- Involúcralos en la elección del orden de introducción de horarios y eliminación de hábitos no saludables.
- Si tiene menos de 4 años, al menos explica claramente las razones de los cambios. Algo así como “De ahora en adelante vamos a empezar ir a dormir cada día un poco antes para poder ayudar a nuestro cuerpo a acostumbrarse a un horario más parecido a cuando vais al cole y estar más descansados”.
- Permíteles escoger y participar en todo lo referente a la vuelta al cole y la preparación del material escolar.
- Comparte lo que te ilusiona de la vuelta a la rutina y pregunta qué les gusta del cole.
- Si entran a una nueva etapa o colegio, aclara sus dudas y céntrate en que les quede claro ¿Cómo será su día a día? El uso de elementos concretos como fotos, vídeos, dibujos de la rutina o visitas al centro puede ser muy útil.
Implementando estos seis tips, no solo facilitarás la vuelta al cole de tus hijos, sino que también fortalecerás vuestra relación y fomentarás un ambiente más armonioso y colaborativo en casa. Eso sí, mantén las expectativas realistas, no se trata de usar las herramientas de la disciplina positiva para evitar conflictos o estar todos felices siempre. Se trata de ayudar a tus hijos a crecer y empoderarles para la vida y eso, muchas veces implica conflictos y frustración.
Un abrazo grande y una “suficientemente buena” vuelta al cole
Angélica Joya