Paco Sánchez Aguilar reconoce tener sus pasiones dentro y fuera de casa. «Soy papá, blogger, técnico sanitario, instructor de actividades acuáticas y socorrismo, profesor de spinning y estudiante de derecho. Siempre con ganas de seguir aprendiendo y con una sonrisa en la cara.»
Especializado matronatación y trabajar en el agua con bebés es autor de libros como «¡Mi bebé flota!» y «Aprender a nadar jugando: método LudoQua»
Podéis seguirle en su web. LudoQua.com
Educación acuática: la seguridad más poderosa
Hoy vamos a hablar de educación acuática, y más concretamente, de aprender a nadar, adquirir habilidades acuáticas como medida de prevención.
A propósito de una noticia que publiqué hace poco con esta casa sobre el ahogamiento secundario y de una noticia de ABC que hablaba que sólo bastan 27 segundos para morir , hoy quiero hablaros de otras medidas de prevención.
Todos sabemos qué medidas físicas podemos hacer efectivas para evitar que un niño caiga por error al agua: vallas, mantas térmicas para tapar la piscina, puertas con candados, etc.
Os voy a poner un ejemplo para enseñaros cómo podemos evitar accidentes: puedes ponerle contraseña a tu móvil o Tablet, pero eso no va a hacer que tu hijo lo coja, eso sólo impide que pueda acceder. En el caso del agua, poner una valla es fenomenal, pero sólo impide el paso, ya que si un día por error o despiste la dejas abierta el niño entrará.
Desde mi punto de vista y como siempre respetando el de los demás, creo que a veces nos olvidamos de la parte “personal” y “emocional”. Deberíamos enseñar a los niños educación y modales en el agua, formas de comportamiento, y de paso, enseñarles a nadar (y técnicas de flotación, relajación…) Con esto conseguiremos muchísimos beneficios:
- Relajación en el agua
- Realización de un deporte muy completo
- Pasar un rato en familia formidable
- Enseñarles educación y respeto al/en el agua
- Mejora el sistema inmunitario y respiratorio.
- Favorece la relajación y conciliación del sueño.
Seguro que habéis oído hablar de lugares (en EEUU sobre todo) donde enseñan a flotar a bebés y niños pequeños en caso de zambullida. Aquí existen varios puntos de vista, a veces contrapuestos, pero voy a ser neutral e intentar sacar lo mejor de cada.
Es fenomenal llevar a tu hijo o bebé a matronatación, será beneficioso para toda la familia. Sólo debes asegurarte que el método de enseñanza es el que buscas y confías en el instructor.
Con 3 años ya podemos empezar a enseñarles técnicas de rescate en el agua que se puede realizar de forma muy divertida, lúdica y educativa. Enseñarles cómo habría que reaccionar en caso de accidente nos permite ensayar y evitar sustos (como los simulacros de incendios).
En definitiva, si me preguntáis cómo haría yo con mi hija para prevenir un accidente en la piscina os aconsejaría lo siguiente:
“A mi hija no la llevo a matronatación puesto que soy instructor, pero desde los 2 meses estoy trabajando con ella en el agua. Trabajo técnicas de flotación, manipulación, inmersiones, relajación y diversos estímulos según va madurando. Le enseño cómo se comporta su cuerpo en el agua, le ayudo a potenciar sus instintos básicos. También trabajo con mi mujer en el agua para cerrar el círculo familiar y que todos los miembros sepamos y estemos involucrados.
Mi hija sabe caer al agua y voltearse (queda boca arriba) pero soy consciente que esto lo trabajamos en condiciones “normales” en la piscina y que pueden surgir golpes, caídas, más personas en la piscina que puedan imposibilitar su “autorrescate”.
Soy consciente que no tenemos que olvidarnos de las medidas físicas como puertas, candados y vallas. Al unir las medidas físicas con medidas “personales” de comportamiento en el agua, tenemos niños más seguros. Un niño tiene que aprender que aunque la valla está abierta no puede tirarse al agua sólo sin un adulto, pero llegado el caso que se caiga sería fabuloso que sepa responder en el agua y tener unos segundos más de maniobra. (más de 27 segundos como citaba el artículo)
Por supuesto, y para finalizar, los niños siempre deben estar con sus padres bajo su supervisión, pero siendo realista, los peligros están ahí y toda prevención es poca.
Y vosotros ¿creéis que es importante la educación acuática?
3 Comments
Dudas? A vuestra disposición 😉
Buenas noches Paco, soy monitora de natacion pero no de matronatacion y me gustaría saber donde puedo asistir a buenos cursos de preparación, tengo un niño de 2 años y cada vez me interesa saber más sobre técnicas de aprendizaje con niños tan pequeños, pues me encanta mi trabajo y creo que es una signatura pendiente que tengo, gracias!
Tienes formación online en mi web LudoQua.com
Cualquier duda a tu disposición en info@ludoqua.com