¿Por qué de repente un bebé duerme menos? El sueño, junto a la alimentación, es uno de los temas que más preocupa a las madres y padres.

Y no es para menos.

El sueño es uno de los aspectos más importantes para el desarrollo de un bebé. Pero muchas veces no sabemos cuántas horas le hemos de dejar dormir, si necesita hacer siesta…

Si es tu caso, posiblemente nunca has oído hablar de las ventanas de sueño, ¿verdad?

En este artículo vamos a hablarte de la importancia de conocer las ventanas de sueño de tu bebé para que descanse lo necesario.

¿Por qué un bebé no puede dormir?

Antes de centrarnos en las ventanas de sueño, queremos recordarte que para saber cómo dormir a un bebé de 3 meses (o los que ahora tenga tu bebé), has de tener en cuenta que hay diferentes factores que influyen en el sueño de un bebé.

Los más habituales: hambre, incomodidad y cansancio.
Porque sí, a veces el mismo cansancio es lo que le impide dormirse.

Por eso es importante que antes de buscar información sobre qué hacer para dormir a un bebe, tengas información sobre las ventanas de sueño de tu bebé.

¿Qué son las ventanas de sueño en un bebé?

Las ventanas de sueño es el periodo de tiempo que un bebé (o un niño) puede estar despierto sin sentirse cansado. Es el tiempo que el bebé necesita para descansar, y recargar energía.

La importancia de conocer las ventas de sueño de un bebé

Saber cada cuánto tiempo tu bebé va a necesitar dormir tiene varias ventajas:Tu bebé descansa lo necesario para su correcto desarrollo.

• Estableces rutinas adaptadas a tu bebé
• Te adelantas a ellas y por tanto, puedes evitar berrinches.
• Os adaptáis a cambios de horario, por ejemplo a la hora de viajar.

Sabiendo todas estas ventajas, a continuación vamos a aprender a identificar esos períodos de sueño.

¿Cómo identificar las ventanas de sueño en un bebé?

Seguro que te has preguntado más de una vez, cada cuánto tiempo tiene que dormir un bebé. Para determinar la cantidad de horas de sueño que un bebé necesita para tener una buena higiene del sueño la referencia es su edad: a más edad, menos horas de sueño.

Aunque cada bebé es diferente, vamos a decirte las horas recomendadas para dormir y cada cuánto ha de hacerlo, cuál es su ventana de sueño.

Para ello vamos a tener en cuenta su edad:

• Ventanas de sueño en un bebé de 2 meses. Un recién nacido, y hasta los dos meses, suele necesitar dormir entre 16 y 18 horas y su ventana de sueño es de entre 45 y 60 minutos.
• Ventanas de sueño bebé de 4 meses. Un bebé de entre 2 y 4 meses necesita entre 14 y 16 horas de sueño cada día. Las ventanas de sueño de un bebé de 3 meses (2 o 4) son de entre 1 hora y 1 hora y 45 minutos.
• Ventanas de sueño bebé de 6 meses. Entre los 4 y los 6 meses los bebés suelen necesitar alrededor de 15 horas de sueño. Sus ventanas de sueño son de entre 1 hora y media y 2 horas y media.
• Ventanas de sueño bebé de 9 meses. Un bebé de entre 6 y 9 meses va a necesitar dormir alrededor de 14 horas. Las ventanas de sueño de un bebé de 8 meses (de 7 o de 9) son de entre 2 horas y media y 3 horas.
• Ventanas de sueño bebé de 1 año. Entre los 9 y los 12 meses de vida tu bebé va a seguir necesitando la misma cantidad de horas que antes, es decir 14. Sin embargo, las ventanas de sueño para un bebé de 10 meses (11 o 12) aumentan 30 minutos y son de entre 3 horas y 3 horas y media.
• Ventanas de sueño bebé 15 meses. Entre el primer y el segundo año de vida un bebé (o ya un niño -¿a partir de qué momento dejamos de llamarlos bebés?-) va a necesitar entre 13 y 14 horas de sueño. Durante estos meses sus ventanas de sueño están entre 4 y 5 horas hasta los 18 meses y entre 5 y las horas entre los 18 y los 24 meses.

Como ves, conforme pasan los meses, la cantidad de horas que necesita tu bebé para favorecer un correcto desarrollo neurológico y físico se va reduciendo y por tanto, las ventanas de sueño del bebé se van ampliando.

La cantidad de horas que necesita dormir un bebé se reparten entre el día y la noche.

Por último, recordarte que tanto la cantidad de horas como las ventanas de sueño son orientativas porque cada bebé es diferente y no siempre las cosas salen según lo esperado.

En caso de duda, siempre consultes con tu pediatra para un óptimo desarrollo y un feliz descanso.