«La infancia es única y debe ser cuidada y respetada por todos, ya que marcará el futuro del niño y su forma de ver el mundo”.
Alejandra Melús es maestra de Educación Especial y experta en Atención Temprana e Intervención Psicomotriz y trabaja con niños de cero a seis años realizando sesiones individualizadas de tratamientos especializados.
Podéis seguirla en su blog Atención Temprana y Estimulación
Descubriendo alternativas en la enseñanza: método de escucha activa, Montessori y método Waldorf
Las pedagogías alternativas y los nuevos métodos educativos están cada vez más en auge como modelos de educación infantil.
Son muchos los que empiezan a emplear métodos de enseñanza que son modelos de vida en la familia y por lo tanto un modo de crianza de sus hijos en todos los ámbitos y no sólo dentro de las aulas.
El método de escucha activa está en boca de todos tras haber saltado la noticia como el método que el Príncipe Guillermo de Inglaterra está empleando para la crianza de su hijo Jorge.
Son muchos los que se preguntan por qué el príncipe se agacha cada vez que habla con su hijo, incluso en actos oficiales y, esto se debe a que está empleando este método que nació en 1950 por el psicólogo humanista Carl Rogers, aunque no fue aplicado en psicología infantil hasta que apareció Thomas Gordon y lo planteó como un método entre padres e hijos.
Método de escucha activa
El método de escucha activa potencia aspectos realmente positivos en el desarrollo de los niños, que serán una buena base en su aprendizaje:
– Potencia el contacto visual entre el adulto y el niño, haciendo que ambos interaccionen y se establezca el primer paso para una comunicación adecuada entre ambos.
– La atención es mayor cuanto más cercanos nos mostremos a nuestros hijos. Si estamos próximos a ellos y evitando distracciones, conseguiremos una mayor comprensión y atención entre ambos. Estar a la misma altura favorece este aspecto enormemente.
– Estrecha el vínculo afectivo entre padres e hijos, donde ambos conectan y comparten sus vivencias y estrechan sus lazos afectivos.
– Mejora la empatía, ya que el adulto se pone en el lugar del niño, y mira a través de sus ojos. Y el adulto es capaz de comunicarle a su hijo aquello que desee desde una visión más cercana y comprensiva.
– Ayuda a compartir momentos juntos, que al estar a la altura de los niños podremos disfrutarlos como ellos lo hacen, sacando el niño que llevamos dentro.
– Poner normas y límites a través de la cercanía, el respeto y la comprensión, no desde la autoridad y la superioridad que nos ofrece estar en otra altura
– Favorece el desarrollo emocional, conectando, sabiendo escuchar sus emociones desde su mirada, comprendiendo el por qué de sus rabietas o enfados, y compartiendo las alegrías y risas.
– Enseña al niño que todos somos iguales y debemos tratarnos como tal, relacionándonos con respecto de igual a igual. Nuestros hijos siguen nuestro modelo y por tanto es un buen patrón de relación para ellos.
La pedagogía Montessori y el método Waldorf
Tienen mucha base en común aunque también hay rasgos que las diferencian.
En cuanto a los aspectos semejantes, destacar que ambas parten del niño y no del adulto para el aprendizaje. Es el niño el que dirige y guía su desarrollo dependiendo de su madurez y, se sigue el ritmo de éste sin importar su edad o lo objetivos comunes, es decir, se parte del propio niño y sus necesidades.
La libertad es base en todo ello, pero no el libertinaje como algunos confunden.
Ambas se centran en emplear elementos del medio ambiente y la naturaleza para enriquecer al niño y al mismo tiempo aprender de una manera natural. Es decir, se emplean materiales como la madera, la piedra, las hojas, el algodón, la cuerda, las ramas, los minerales, la seda… Materiales que invitan a desarrollar los sentidos sin componentes químicos o sin haber sido tratados.
Además son materiales sin una finalidad concreta, que invitan a crear e imaginar, a favorecer el desarrollo artístico y creativo del niño, potenciando el desarrollo de los sentidos. Favorece la conexión con lo más básico y el desarrollo a partir de ello.
Se fomenta la perseverancia y la constancia en el trabajo, el esfuerzo y el trabajo en grupo o equipo.
Las calificaciones no existen, ya que no se juzga al niño, no se le premia ni castiga por alcanzar nuevos objetivos o no conseguir nuevos. Se le anima y alienta y se le enseña a reflexionar sobre lo que hace para tener su propio criterio y reconocimiento.
La autonomía personal y los aspectos domésticos tienen un gran peso en el día a día, ya que se cuenta con un espacio concreto en el aula para ello, como un lavabo, una pequeña cocina o un huerto.
– Montessori además parte de ofrecer elementos relacionados con la lectoescritura a partir de los 3-4 años, dándole un papel importante en su filosofía, a base de abecedarios, cuentos, juegos…
Sus materiales suelen tener una finalidad más concreta y buscar unos objetivos determinados, aunque se da libertad al niño a escoger y actuar.
– El Método Waldorf parte más de la imaginación y la fantasía, dando mucha importancia al desarrollo artístico del niño y a su libertad en el aprendizaje. Considera que la infancia debe de ser cuidada ya que los niños son el futuro.
Además sus materiales no tienen una finalidad concreta más allá de desarrollar el pensamiento y la creación por parte del niño.
La lectoescritura se inicia más tarde, ya que en la primera infancia se considera que es más importante fomentar otros aspectos.
Mi opinión profesional, es que el hecho de emplear métodos que tienen en cuenta al niño como parte activa del aprendizaje, hacen que su desarrollo sea más nutritivo y vivencial, aportándoles estrategias para madurar de forma autónoma e involucrándoles en ello.
Según mi experiencia he podido observar su eficacia y el beneficio de emplear muchos aspectos de estas pedagogías.
Estas bases están sentadas sobre años de experiencia y trabajo, y vienen empleándose desde hace mucho tiempo, mostrando su eficacia y sus beneficios en la enseñanza y crianza de los niños.
Ahora que conoces más sobre estos métodos educativos, ¿te animas a probarlos? ¿Te parece que pueden ser beneficiosos en la enseñanza de tus peques? ¿Empleas alguno de ellos en la crianza de tus hijos?
Crédito de foto de portada: El País
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