Cada chupete tiene una historia pero sin duda, la historia que engloba los chupetes Hevea Baby es una de las que más impacto social está teniendo en los últimos meses.
Están fabricados en una sola pieza y en caucho natural. Un caucho que es extraído de forma manual del árbol de Hevea que pertenece a una plantación situada en Malasia. Los chupetes de Hevea son chupetes ecológicos, respetuosos, eficaces y seguros para los más pequeños.
CARACTERÍSTICAS DEL CAUCHO
Hevea, el nombre del empresa, proviene del Latín y hace referencia al propio nombre del árbol del caucho llamado ´Hevea Brasiliensis´. El caucho natural que la propia empresa produce, es la base más importante de todos sus productos. Una materia prima natural que otorga exclusividad a todos los productos que desarrollan.
A diferencia del caucho sintético (fabricado con petróleo), el caucho natural reduce el uso de combustibles favoreciendo de esta forma la lucha contra el cambio climático y siendo 100% reutilizable.
El caucho desprende un aceite natural que aporta un sabor y una suavidad muy característica que gusta a los bebés.
¿CÓMO SON LOS CHUPETES DE HEVEA?
Los chupetes Hevea están realizados en una sola pieza, lo que garantiza un diseño muy higiénico. Al no existir ningún orificio, impide que se puedan acumular bacterias y facilitan su limpieza.
Su forma es ergonómica y de mariposa, otorgando gran comodidad al bebé por su fácil adaptabilidad, y respetando el espacio para la nariz y la barbilla. Además, sus nuevas colecciones incorporan diseños como estrellas, lunas, flores o coronas y ofrecen la posibilidad de elegir entre una amplia gama de colores.
Principales características:
- 100% látex natural suave
- Previene el vacío alrededor de la boca del bebé.
- Fabricado sin PVC, BPA, Ftalatos o tintes tóxicos.
- Se debe esterilizar antes del primer uso y cámbialo cada 2 meses.
- 100% Biodegradable.
Los chupetes de Hevea Baby están disponibles en 2 tetinas diferentes: Tetina Anatómica y Tetina Redonda.
Tetina anatómica: Fue patentadas hace 40 años. Es una tetina que se adaptan al paladar permitiendo a la lengua realizar los movimientos de deglución más adecuados y similares a los que se realizan con la lactancia materna.
Tetina redonda: Es la tetina más clásica y también es conocida como la tetina con forma de cereza. Algunos profesionales la recomiendan como parte del método Kassing. Aseguran que al ser más larga de lo normal, puede tocar el punto en el que se unen el paladar duro y paladar blando y así ayudar al reflejo de succión.
Siempre debemos recordar que el chupete debe ser adecuado a la edad y necesidades del niño y que cualquiera, sea de la marca que sea, tiene una vida máxima recomendada de 2 meses.
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