Laura Alcober es fundadora de pekefriendly, la primera marca de calidad gratuita para identificar sitios adaptados a familias con niños. En la web encontraréis el directorio completo con establecimientos en toda España y en su blog Tras los Pekes, podréis descubrir las aventuras y desventuras de ser madre y trabajadora.
Además hace más de diez años que se dedica al mundo de la protección individual y, por ello, al marcado CE.
Después de que una clienta avisara a Teresa de que había visto las Bunny Doll en una tienda a un precio irrisorio y que fuera, creo, una de las fotografías más comentadas en el Instagram de Tutete, creí conveniente ofrecerme para hacer este post y explicaros un poco más la importancia del marcado CE.
Unión Europea – Defendamos nuestra marca
Intentaré no ser muy tostón, pero creo que hay que contar un poco por qué aparece el marcado CE.
Hasta 1983, cada país miembro de la Unión Europea disponía de su propia legislación. En ese año se empezó a plantear abrir la puerta a personas y bienes en todos los países para permitir su libre circulación, pero esto tenía sus peligros: cada país tenía su propia legislación, así que había que establecer unas “normas de juego” básicas para que no hubiera problemas en ningún país.
– Normas de uso del marcado CE
– Requisitos mínimos de los productos para poder llevar este marcado
¿Verdad que nunca veréis que una gran marca como IKEA o Coca-Cola la utilice una empresa sin su autorización? Pues para eso mismo están las Directivas, para marcar cuándo se puede y cuándo no se puede usar el CE. Pensad que es NUESTRA marca de calidad como miembros de la Unión Europea y, como tales, debemos protegerla.
Un juguete no certificado puede salir muy caro
Existen directivas para muchas cosas, pero sobre todo son para lo que puede GENERAR O PROTEGER DE UN DAÑO. Puede ser por ser un producto peligroso, porque en el uso se genere un peligro o, como en el caso de los equipos de protección individual, por proteger de ellos.
Aquí viene lo bueno: las directivas en general y la de juguetes en particular, exigen que el producto sea COMPROBADO por un Organismo independiente (Organismo Notificado) para que diga que ese producto es seguro.
En estos organismos lo que hacemos es comprobar la toxicidad, que el diseño sea el adecuado y, en resumen, que un producto se puede poner en el mercado DE FORMA SEGURA.
¿Verdad que no daríais a vuestro hijo un producto no seguro? Imaginad que se puede tragar una pieza: ¿no os saldría muy muy cara la diferencia de precio?
No sólo estamos hablando de piezas, sino también de los materiales: comprobamos que el pH sea adecuado, que no contengan sustancias cancerígenas, que no manchen… Pensad que vuestro hijo se mete un juguete en la boca y acaba con la boca teñida y no sabéis qué es lo que se la ha pintado… ¿Verdad que no estaríais tranquilos?
¿Y si se pone a jugar con un peluche y le salen granitos en la cara?
Pensad que todos los ejemplos que estoy enumerando son con consecuencias visibles, pero… ¿y si no lo son?
Aunque tú no lo sepas, se controla
Las autoridades realizan controles de mercado en los que se comprueba que los productos cumplen con los requisitos necesarios para poder circular por Europa. Incluso en aduanas se paran contenedores enteros y se han llegado a destruir si no se consideraban seguros. Podéis estar tranquilos, aunque si no lo estáis del todo siempre podéis denunciar.
Si además queréis tener unas mínimas guías para comprar tranquilos, os dejo algunos consejos.
Mi recomendación, como madre y experta
Primero de todo, comprad los juguetes en tiendas que se dediquen a ello porque partís de una garantía previa que otras tiendas no os dan. No os recomiendo que compréis algo con lo que vuestros hijos van a tener una “relación tan estrecha” en tiendas donde podéis ver juguetes al lado de productos de limpieza, zapatos y cojines. La diferencia de precio puede salir muy cara.
No os dejéis llevar por eso de “si al final todo se fabrica en el mismo sitio” porque sí, pero no. Hay muchos productos que se fabrican fuera de Europa, pero han pasado previamente por un Organismo Notificado que da fe de su seguridad. Otros no.
Incluso en tiendas dedicadas a ello, si os queréis quedar tranquilos, mirad que la marca CE es la que debe y no significa CHINA EXPORT. Esta entidad china ha “secuestrado” de mala manera nuestra marca CE y pone la diferencia en una mínima distancia entre la C y la E.
¿Verdad que la diferencia es sutil? Sólo hay que cerrar el círculo de la C y veréis que “entra” demasiado en la E. Si el caso que tenéis delante es este último, es vuestra decisión, pero NADIE os va a asegurar que ese producto sea SEGURO.
Tal vez sea que llevo muchos años en esto y que “me creo” el trabajo que hago, pero os aseguro que yo no me lo plantearía.
Yo no juego con sus juguetes ni con su seguridad.
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