Cuando preparamos la llegada de un bebé a casa, comienzan a surgir muchas dudas, sobre todo cuando es la primera vez. Qué muebles elegir, qué es necesario y no nos puede faltar, de qué puedo prescindir al principio… Y es que además de acondicionar la casa para su llegada, también tenemos que tener en cuenta el espacio y la decoración.
Puede parecer una tontería, pero la cuna es uno de los primeros muebles que debemos tener en cuenta, ya que es donde el bebé pasará más horas y en el sitio en el que descansará, y también de los que más quebraderos de cabeza darnos.
El espacio dentro de la habitación es fundamental para elegir un tipo de cuna u otro, y más, si queréis que los primeros meses el bebé duerma en vuestra misma habitación, por lo que el espacio se reduce algo más. Para eso, las minicunas son la mejor solución, ya que como su nombre indica, tienen un tamaño más reducido de lo habitual.
Gracias a sus dimensiones, además de facilitar su colocación dentro de casa, también son muy cómodas a la hora de moverlas y de interactuar con el bebé. Al ser más pequeñas, ellos también están más protegidos y seguros, ya que suelen venir acolchadas y sino nosotros podemos incluir alguna almohada alrededor para que sea mucho más segura.
Si quieres comprar una minicuna para tu bebé, asegúrate de que las barreras de protección son lo suficientemente altas para que el niño no pueda caerse. Debes tener en cuenta que en estas cunas el colchón está mucho más elevado que de costumbre.
Seguro que encontrarás la más adecuada para tu bebé.
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