Teresa es periodista y diseñadora gráfica. Se define curiosa y amante del papel aunque no se separa de su portátil. «Escribir es algo que puedes hacer en cualquier momento y en cualquier soporte, en una servilleta de bar o en las notas del móvil; luego, con internet te conectas con todo el mundo».
Desde hace varios años trabaja de forma autónoma en todo lo que huela a comunicación: «Todo es comunicación, es imposible no transmitir».
Además, es formadora («Aprendo tanto como enseño») y colabora en distintas publicaciones on line y off line.
Podéis seguir su trabajo en su web y en su blog Comuunicar.
Cuentos para leer en vacaciones
Ya están aquí las vacaciones de Semana Santa y podremos compartir con niños y niñas más tiempo y, entre otras actividades, leer juntos contribuye a construir un lazo afectivo con estas personitas.
La lectura con niños y niñas, incluso desde antes de los dos años, impacta en el desarrollo del lenguaje. No solo aporta un vocabulario mayor sino que permite un mayor reconocimiento de situaciones y emociones, lo que logra una mayor facilidad de expresión en los pequeños.
Hay temas que tienen un atractivo especial para peques y mayores, como las sirenas de Palabras de sirena, escrito por Mia Cassany y los maravillosos dibujos acuosos de Esther Gili. Junto a Vilma, la inquieta protagonista, nos descubren adónde van a parar las palabras que olvidamos.
Y sin salir del agua, Los piratas ya no son lo que eran, también de Cassany pero con ilustraciones de la reconocida Patricia Geis. Sus ilustraciones nos invitan a analizar los contrastes entre ayer y hoy en el mundo pirata, ahora con gafas, móviles y zapatillas molonas.
También las princesas han cambiado. Ahora son enérgicas, modernas y llenas de vida y de preguntas que hacer, como la protagonista de ¿Las princesas usan botas de montaña? Este libro es un canto a la aceptación y a la contribución de cada persona en el mundo. Bueno para peques y mayores.
Cualquier historia, sobre todo aquellas que hablan de situaciones fácilmente reconocibles para todas las personas, os permiten hacer preguntas y que sean los niños quienes las respondan. No importa tanto seguir la estructura del cuento como que las niñas puedan expresarse a partir de la excusa que nos da el libro. Cuanto más abiertas sean las preguntas, más favoreceréis la imaginación y el discurso infantil.
Así, ¿qué mejor que leer juntas Abuelas de la A a la Z? Porque hay abuelas en todos los confines de la Tierra: abuelas Consiguelotodo, abuelas Reposteras, abuelas Tejedoras de cuentos…
Y hay abuelos a quienes los nietos cuidan, claro. Cómo cuidar a tu abuelo les da indicaciones sobre cómo cuidar de sus mayores correctamente. ¡Para ponerlo en práctica estas vacaciones! Y lo tenéis también en versión abuela.
Si cuando buscáis un libro para regalar, no os fijáis solo en el texto (que también) sino en la ilustración y en el diseño del libro en su conjunto, fichad Mogollón, un libro gamberro recomendado a partir de los cinco años.Sorprende la impresión a dos tintas, algo más habitual en los formatos dirigidos a un público adulto.
De nuevo Mia Cassany cuenta cómo Lucas decide un día salir a buscar novia. Dedicad tiempo a mirar los dibujos, a preguntar sobre ellos, a imaginar la vida de cada personaje, a contar historias que no están impresas… Miguel Bustos perfila sus abigarrados dibujos con un humor fino para niñas y niños inteligentes que ven mucho más de lo que creemos.
Un último consejo: que no os asuste compartir aquellas historias que os gusten, aunque estén recomendadas para más edad, con infantes de 2 o 3 años. Descubriréis que esos relatos pueden cobrar un nuevo espíritu si compartís su lectura.
Probad a compartir alguno de los libros de La Volátil (alter ego de Agustina Guerrero), una treinteañera con camiseta de rayas que nos habla de su vida en distintas etapas y a la que es imposible no querer: Érase una vez La Volátil, Diario de una Volátil y La Volátil Mamma mia!
¿Preparadas para las vacaciones? ¡Feliz lectura!
Leave A Reply