Que los niños aprendan a comer solitos es una de las fases más importantes de los primeros años de vida. Y es que aprender a ser autónomos poco a poco es una de sus tareas más difíciles y fundamentales.
Así que hoy os hablamos de uno de nuestros productos estrella las vajillas para niños Re-Play. Vasos, botellas antiderrame, cubiertos, platos y platos compartimentados, bols o cuencos fabricados a partir del reciclado de botellas de leche.
Aquí os dejamos un vídeo (en inglés) para que veáis el proceso.
¿Verdad que es una pasada? Además como sabéis en Tutete nos preocupamos mucho de que los materiales de nuestros productos ofrezcan la máxima seguridad. El plástico que utilizan en Re-Play es polipropileno (PP) −el llamado plástico ecológico−, apto para estar en contacto con alimentos, ya que no contiene Bisfenol A (BPA) ni ftalatos.
Vajillas bonitas y prácticas
La simplicidad de sus diseños resalta el color como elemento decorativo sin renunciar a un diseño funcional. Podéis elegir entre colores saturados, más vibrantes y atractivos para los niños, y colores pastel. Además, son fáciles de almacenar sin que ocupen demasiado espacio.
El material del que están hechas permite que puedan usarse en microondas y lavavajillas sin problemas. Sólo una advertencia: al calentar salsas o verduras que dejen restos de color como el tomate, la zanahoria o la calabaza pueden mancharse pero esto no afectará al material.
Son extra resistentes. Es más prácticamente su plástico es irrompible, de hecho no hay problema en que les pase un coche por encima, como podemos ver en el vídeo. Así que no os preocupéis si vuestros peques los tiran al suelo.
Comer solos de forma segura
Todos estos utensilios de mesa están pensados específicamente para que los más pequeños (a partir de 9 meses) aprendan a comer solos. Los vasos antiderrame llevan una válvula de silicona de una sola pieza para darles autonomía al beber hasta que puedan hacerlo con los vasos abiertos.
Los cubiertos –que se venden en packs formados por 4 cucharas y 4 tenedores– son blanditos para que los niños no se lastimen con ellos.
Los platos tienen un único contenedor o tres diferentes, lo que resulta muy útil con aquellos niños que son más mirados con las texturas. Los compartimentos mantendrán separados los alimentos sin que se mezclen sus salsas o sabores.
Fuera de casa
Las botellas para niños son fáciles de sujetar, así que son ideales como transición entre el biberón y el vaso. Tienen una boquilla de silicona antiderrame que también las convierten en la mejor opción para dar agua a los niños fuera de casa.
Los bols o cuencos los tienes en los mismos colores que los demás elementos, como los botes de snacks. Son fáciles de transportar para las meriendas, por ejemplo, y se complementan perfectamente juntos.
¿Qué os parecen? ¿Verdad que son chulísimos?
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